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RECONCILIÁ A TUS PACIENTES CON EL DULCE

¡Hola! Si sos una nutricionista en busca de recomendaciones sobre cómo ayudarles a tus pacientes a crear postres más saludables, este blog es para vos. En estas fechas de San Valentín, muchos de tus pacientes pueden sentir mucha ansiedad sobre qué comer y qué no, especialmente cuando se habla de lo dulce. 

Desarrollar hábitos saludables en tus pacientes es algo realmente positivo, pero sabemos que el verdadero reto está en que esos hábitos se mantengan y en no satanizar ningún alimento. La mejor manera de lograrlo es hacer que las comidas sean placenteras, ya que, si las personas disfrutan lo que comen, es mucho más fácil que lo sigan haciendo en el largo plazo. Además, debemos de tener en cuenta las características de cada persona: su etapa de vida, objetivos, entre otros.

Aquí es donde entran los postres. Es lo primero que la gente piensa en dejar de comer cuando quiere cuidar su alimentación, pero no tiene por qué ser así. Comer algo que te gusta y que te da tanto placer es clave para mantener esos hábitos sostenibles de los que hablábamos antes.

Aquí te dejamos algunos consejos para que compartás con tus pacientes y para que puedan preparar postres que se adapten a sus necesidades:

Las frutas y los vegetales frescos, son los ingredientes #1 para un postre rico y saludable.

Recomendaciones:

  • Es importante que aporten una gran cantidad de vitaminas y minerales.
  • Preferí aquellos alimentos fuente de antioxidantes.
  • Buscá aquellos ingredientes que complementen el sabor de las recetas.
  • Buscá aquellos que tengan menor huella de carbono.

Algunos carbohidratos tienen un mejor impacto en la salud que otros. Por ejemplo, la avena integral, el arroz integral, el maíz y la quinoa son excelentes opciones que aportan muchos beneficios a la salud.

Recomendaciones:

  • Buscá los que sean fuente de fibra dietética.
  • Preferí los que contengan menos cantidad de CHO refinados y simples.
  • Usá aquellos que aumenten la saciedad.
  • Preferí alimentos que contribuyan con una glicemia estable.
  • Usá los que aporten nutrientes funcionales.

Existen varios sustitutos de la mantequilla que pueden mejorar la calidad de una receta. El aceite de oliva o el aguacate son excelentes fuentes de grasas monoinsaturadas, la chía aporta omega-3, y la compota de manzana o banano son todas buenas opciones que pueden añadir sabor a los postres.

Recomendaciones:

  • Buscá que aporten más grasas monoinsaturadas.
  • Preferí los que aporten omega-3.
  • Usá los que incorporen alimentos sustitutos de grasa.

Usar Natuvia con probióticos y yogurt natural o griego en los postres no solo mejora su valor nutricional, sino que también aporta probióticos. ¡Y si además lo combinan con fibra, aún mejor!

Recomendaciones:

  • Buscá los alimentos que aporten probióticos para mejorar la microbiota y sus funciones.
  • Preferí los prebióticos que sirvan de alimento para la microbiota y mejore su funcionalidad.
  • Usá los ingredientes que aporten antioxidantes para disminuir los radicales libres y sus efectos dañinos.

Las tres presentaciones de Natuvia ayudan tanto a que las recetas mantengan ese dulce sabor que tanto nos encanta, como a mejorar el valor nutricional de las mismas. Además, es apto para personas que viven con: diabetes, intolerancia al gluten, enfermedades cardiovasculares y problemas gastrointestinales.

Los postres y las recetas dulces en general, pueden ser grandes aliados para ayudar a tus pacientes a mantener hábitos saludables y a ver la comida como algo positivo. Motivalos a que cada bocado sea un paso más hacia una mejor relación con la comida.

Dra. Gabriela Cartín Castro

Nutricionista CPN 243-10